Florence Cassez, el complejo de la chica blanca en desgracia

Hace tiempo que escuche sobre el llamado Síndrome de la mujer blanca desaparecida (Missing White Woman Syndrome, MWWS) una expresión que refiere a la desproporcionada atención mediática que se da a los casos de personas desaparecidas cuando éstas son mujeres jóvenes, atractivas, de clase media o media alta y de raza blanca, en comparación con los casos de desapariciones de hombres y personas de otras razas o clases sociales, algo que quizás pueda aplicarse a Florence Cassez, la secuestradora francesa más sexy de las prisiones mexicanas, pero en su versión de Síndrome de la mujer blanca en desgracia que debe ser salvada por su chiquito caballero, en este caso el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, aunque finalmente no es algo que surja únicamente por el agrado de Francia con Cassez, sino por la irregular aplicación de la justicia en este país que suena a injusticia y corrupción.

Y no es ningún secreto para los jueces y medios mexicanos, que Florence Cassez fue detenida en una simulación de rescate, que en cualquier país del mundo con un nivel de derecho y justicia desarrollado, le hubiera merecido salir libre, aún si fuera culpable.

Sí señores y señoras, porque aunque cuando para muchos no sea claro el concepto de que la justicia es ciega, ya que es difícil entender que en "el juego de la ley", la justicia implica que no siempre pueden ganar los buenos, o los presentados como tal, sino los argumentos y pruebas que se tengan para demostrar la culpabilidad o inocencia del imputado.

Y el caso Cassez está plagado de irregularidades e intervenciones demasiado inverosímiles por parte del Gobierno Federal para definir su actuación como justa y equitativa. Siendo también curioso que la AFI o Agencia Federal de Investigaciones, responsables de la captura de Cassez, haya tenido que desaparecer por haberse convertido en un nido de corrupción.

Con influencia todo se puede Papi.

Nadie habla de la liberación de la narcotraficante Sandra Ávila Beltrán llamada por la PGR "Reina del Pacífico", ni hay demasiado empeño por mantenerla encerrada, quien se daba el lujo de recibir tratamientos de belleza dentro de la prisión, ni de la hija de Alex Lora, Cecilia Lora, quien salió libre pese a ser culpable de atropellar y matar a una persona. AnaBarba y el Caso de la niña Paulette son la punta de una larguísima lista de casos donde el gobierno federal y estatal olvida ese empeño que pone en un caso como el de Florence Cassez.

La justicia, je, je. Ya caigo.

No sé si sea o no culpable, pero no me queda duda de que no se puede esperar una justicia que surge de un acto irregular y arbitrario, porque en México la justicia es un chiste, como este caso.

Pus, se hizo "justicia", ¿que no?