Además de Cristal oscuro, su otra cinta de culto que no involucre Muppets, se encuentra en su particular visión de Peter Pan, Labyrinth (1986) con David Bowie y Jennifer Connelly.
Ambas cintas presentan un planteamiento temáticamente común de los años ochentas americanos del siglo pasado, con su moralidad y orientación entre lo infantil y lo adulto que tanto daño le hizo al cine de género como la Fantasía y la Ciencia ficción.
Pero es Dark Crystal la que muestra otros elementos que la hacen trascender y no dejarla como un producto del montón, sino como la obra cumbre del cine de marionetas a unos niveles que envidiaría cualquier animador por ordenador del siglo XXI.
Jim Henson planea una secuela que se situará cronológicamente varias centurias en el futuro de los hechos de Dark Crystal que será dirigida por los hermanos Peter y Michael Spierig.
La Trama
Jen, quien se supone el último de los Gelfling, se embarca en una aventura para localizar el fragmento perdido del cristal oscuro y así restaurar el orden en el mundo, azolado hace mil años por los maléficos Skeksis, su tarea lo obliga a emprender la marcha y llegar antes de que la alineación de los trs soles que propiciará la unión de los dos fragmentos del cristal de la verdad, que fue traído a su mundo por una raza alienígena, los Urskeks.
El gelfling es resguardado por los Maestros, pero al abandonar su refugio, es visto los Skeksis quienes después de fallecer el emperador, están embarcado en una lucha por la sucesión al trono.
En la persecución del gelfling por los Garthim, esbirros de los Skeksi, Jen encuentra por casualidad a Kira, quien se siente feliz por no ser el único de su especie, los dos sin sospecharlo están siendo acechados por sus enemigos, mientras que los Maestros emprenden su camino al reino de los Skeksi y así cumplir su profecía.
Crítica
Si bien la historia no deja de ser el tipo de historia encontrada comúnmente en el cine y las series de televisión, contiene escenas crudas y oscuras, que en parte, junto a ser estrenada al lado de E.T. the Extra-Terrestrial (1982) de Steven Spilberg, evitó que lograra una buena recepción en su estreno, aunque no fue un desastre financiero, en países como Japón y Francia incluso desplazaron a la película de Spilberg como la más taquillera del año.
Sea como fuere, pese a una trama no tan brillante y bastante predecible, es en los decorados y la maestría titiritera donde destaca y se hace una experiencia obligada para cualquier cinéfilo que se precie.
La secuela abundará nuevamente sobre el cristal oscuro que fue dejado al cuidado de los Gelfling, donde podemos ver a Kira en una de las imágenes, vestida de Urskeks.
Calificación: 7.5/10 |
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