Elijah Wood, mundialmente conocido por su papel en el Señor de los anillos hace su migración a la televisión, interpretando a Ryan, protagonista de la serie, un ex-abogado que quiere acabar su vida, aparentemente sin lograrlo, es en ese intento que conoce a su nueva vecina Jenna (Fiona Gubelmann) quien le presenta a Wilfred (Jason Gann), su perro, a quien Ryan ve como un hombre con un disfraz canino, pero se da cuenta que él es el único que puede verlo así.
Wilfred es un perro manipulador y mal amigo, que no por ello deja de comportarse como otros de su especie. Volviéndose su amigo inseparable, con quien fuma mariguana y vive lejos de las constantes presiones de su hermana Kristen (Dorian Brown) por darle otro trabajo, cuando parece incapaz de estar preparado para un mundo de responsabilidades.
Con una temporada corta de solamente 13 episodios, lo que se predecía como una comedia romántica convencional, se volvió una serie de humor negro que llevó a un drama oscuro que a diferencia de la versión australiana, se abunda en la posibilidad de que el protagonista esté realmente loco ya sea por su herencia genética [Ver episodio 9: Compasión] o por su turbulento pasado de abogado [Ver episodio 13: Identidad].
Aunque pareciera que es Wilfred el manipulador de este pobre y desgraciado sujeto, Ryan tiene un lado oscuro y negativo que le da ese tono extra que hace tan extraordinario un argumento tan raro de un sujeto en traje de perro que a su vez tiene sus propios dramas: "dramas de perro" que se convierten en las trivialidades de un humor negro bastante potente como ocurre con el veterinario que le da a Wilfred cajeta para que le chupe los testículos [Ver episodio 4: Aceptación], que todos pueden ver a donde conduce y la genialidad de tratarlo mediante un supuesto perro, lo que sería inaceptable con un niño.
El carácter depresivo de Ryan contrasta con el de Wilfred, siendo un personaje que no tiende a ser cómico, ni lo pretende, como pasa con el resto de los personajes, donde toda la comedia involuntaria recae en Wilfred.
La primera temporada finalizó con un brutal giro argumental en un solo paso, que nos lleva a confirmar -o al menos en parte-, lo que realmente es Ryan y en lo que se está convirtiendo, a diferencia de otras comedias, todos los episodios están conectados y forman parte de una continuidad bien establecida que van a un solo fin, en vez de series Sitcom (Comedia de situación) como de The Big Bang Theory, donde se pretende divertir al espectador, mientras la trama puede no llevar a nada o cuyo desarrollo es lento y difuso.
Tampoco es una serie romántica que conducirá a la forzosa relación de Ryan y su vecina, por la que comienza a sentir más que afecto -aunque no hay química-. En un gran acto de coherencia argumental, ella tiene un novio a su nivel -al que Ryan ayuda hasta que decide intentar arrebatársela de mala manera y que desatará el gran final de la temporada.
No sé si podrán mantener la premisa final de la serie y regresen sobre sus pasos con un episodio parche, en vez de centrarse en la demencia inevitable del protagonista.
Como cinéfilo no tengo demasiado conocimiento de las reglas de las series de Televisión, aunque es claro que no es un humor que a todos gustará -más a tono con el cine-, más cuando lo común es que las historias sean puntuales, en vez de una sola repartida a lo largo de toda la temporada y que no cuenten con elementos veladamente mainstream.
Wilfred es una serie de humor para audiencias adultas, aún así recomendable si eres de los que gusta mas de la trama que los momentos cómicos que una serie pueda tener.
Calificación 8/10 |
Comentarios y Consultas
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1 comentarios:
Esta muy efectiva esa serie, ultimamente como que el humor negro representa mas audiencia para la television
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