Dr. Insólito o cómo aprendí a dejar de preocuparme y amar la bomba (1964): Review y crítica de la película

Dr. Strangelove or: How I Learned to Stop Worrying and Love the Bomb, es una película del cineasta Stanley Kubrick, quien se ha ganado su lugar de director de culto del siglo XX hasta nuestro días, uno de los más grandes visionarios de cine moderno del siglo XX.

Nos encontramos ante una sátira de la guerra fría, quizás "la sátira" de la guerra por antonomasia, guionizada por el escritor de estilo satírico Terry Southern, Stanley Kubrick y Peter George, este último escritor de la novela Red Alert en que se basa la película que curiosamente es muy similar a la novela Fail-Safe de Eugene Burdick, que sirvió para la película homónima dirigida por Sidney Lumet, ambas películas se estrenaron en el mismo año, 1964.

Peter George de hecho fue demandado por plagio, aunque finalmente el problema fue resuelto fuera de la corte.

Mientras que la novela era un planteamiento más convencional y parecido a la película Fail-Safe, donde el Presidente ofrece a cambio de la destrucción de Moscú, la ciudad de New York para evitar la guerra nuclear, pero con un final feliz donde se detiene en el último momento el apocalípsis, Kubrick decide ir de lleno sobre el tema como una parodia, lo que le permite un alcance más efectivo y desenfadado en su ficción, que un drama no podría tratar, en parte por evitar ser considerada como anti-americana.

Como sátira, solamente El gran dictador (1940) y Tiempos modernos (1936) de Charles Chaplin se le puede acercar en alcance en fama a lo largo del tiempo, aunque es Dr. Stragelove quien crea la primer gran sátira moderna de la guerra, que además nos ofrece uno de los mejores finales clásicos del cine mundial y sienta uno de los más importantes precedentes de la comedia negra.

El clásico final del Mayor 'King' Kong montado en la bomba.

Trama
La historia nos pone en los zapatos del agregado militar británico, el Capitán Lionel Mandrake (Peter Seller), quien se encuentra a ante una inminente crisis que pondrá al mundo en peligro, pues el encargado de una base de bombarderos estratégicos, el General de Brigada Jack D. Ripper (Sterling Hayden) se ha vuelto loco debido a la "impotencia sexual".

Culpando a los rusos por su situación y declarando que la fluorización del agua era un malévolo plan para volver a los americanos impotentes, por lo que decide cerrar la base y enviar por su propia cuenta, los bombarderos a lanzar un ataque nuclear contra la U.R.S.S.

El salón de guerra es una parodia de una mesa de juego de cartas.

Por otro lado el Presidente de los estados Unidos, Merkin Muffley (Peter Seller) está asustado por la posibilidad de que el ataque no solamente desate una represalia nuclear, sino que provoque la explosión del Dispositivo del Juicio Final.

El Enigma de Jack D. Ripper

Dicho dispositivo fue construido por los soviéticos como la última arma disuasoria de la doctrina de la Destrucción mutua asegurada (MAD), instalada en territorio soviético, cuya explosión dejará sin vida a todo el planeta. Lo que le obliga a dar a los rusos las trayectorias de los bombarderos para su intercepción, entre ellas la tripulación del Capitán King (Slim Pickens) que no permitirán que nada se interpongan en su misión, luego de que un ataque con misiles los deja sin radio y por tanto, sin capacidad para recibir el código de cancelación.

Peter Seller interpretando al presidente de los Estados Unidos

En el bunker del Presidente, el Doctor Strangelove (Peter Seller), un nazi que fue llevado a los Estados Unidos en la posguerra, ya hace los cálculos para la supervivencia de la raza humana.

Calificación: 8.8 /10

Crítica
La película cuya trama es un loco general que inicia la Tercera guerra mundial como retaliación a un problema erección precoz, donde los títulos de créditos son escenas de naves atracando constantemente las unas a las otras y una metafórica venida al caer la bomba, se ha hecho su paso como una de las películas más icónicas del siglo XX y quizás la sátira más conocida de la historia del cine y muestra del poder narrativo de un director ambicioso y meticulista como Kubrick al plasmar su visión del fin de los tiempos en una batalla de pasteles que finalmente se desechó.

No es una cinta que se centre en la tensión fuera del hecho de satirizar las paranoias militaristas que podrían desatar un holocausto nuclear, como la estupidez de Jack D. Ripper de acusar al agua fluorizada de su incapacidad para satisfacer a su esposa y como un método de resaltar las partes graciosas con escenas que muestran el miedo real de jugar con armas nucleares.

Peter Seller hace de tres de los protagonistas principales, en dos de las tres historias que suceden al mismo tiempo, el Presidente y el Dr. Strangelove en el Bunker tratando de cancelar el ataque y el Capitán Lionel Mandrake, un extranjero "aliado" que le intenta hacer ver la estupidez de sus acciones al norteamericano General Ripper, cosa que no logra.

Debido a que se lastimó durante la filmación, Seller cede su papel de Mayor Kong a Slim Pickens con su potente acento sureño, quien termina montado en la bomba nuclear que desata el apocalípsis.

El Bunker del presidente y su mesa de operaciones tiene una forma circular inspirado en una mesa donde los jugadores se apuestan todo en una carta.

A diferencia de Fail-safe (1964), Dr. Stragelove, es una película que da una sensación de verosimilitud y realismo, que logra en parte por no ser una obra que sienta un compromiso argumental, fuera del deseo de experimentar con una historia que ni siquiera se toma en serio a si misma, es por ello que es una de la cien mejores cintas de toda la historia, mientras que Fail-Safe es una de tantas cintas de la Guerra fría.

Imprescindible.