Violet Evergarden (2018) Mikasa recibe una serie de anime propia... o algo así - Estrenos

Usar la voz de Mikasa para lanzar una serie muy pretenciosa y preciosista, con un autor apenas conocido sobre un tema ya visto antes... tiene a los fans del estudio locos.

Kyoto Animation hace una adaptación de Kana Akatsuki, quien por Violet Evergarden obtuvo el premio a mejor novela, escenario y manga, en la quinta entrega de los premios a la animación de Kioto, parece que eso ha sido suficiente para pensar que será un suceso.


Si no reconocen a este estudio, son los famosos animadores de Suzumiya Haruhi no Yūutsu y KON!, además de las películas, que son realmente geniales en el nivel técnico y de guión.

Mi opinión es que esta animación es un ejercicio exagerado, un despliegue visual inútil, porque en el fondo me aburrí.

¿Qué es esta historia?  ¿Un shojo? ¿Seinen? No lo sé, pero nos es bueno que no lo tenga asignado cuando debería.

Bueno, la historia es como una fantasía femenina, pero podría ser salida de la mente de un hombre, la premisa básicamente no tiene un sentido realista y llega a ser inverosímil dentro de las reglas del mismo universo donde se escribe.

Es Mikasa con ojos verdes y cabello rubio... ja.

Se supone, que un científico crea a una humanoide llamada Auto Memory Doll con el objetivo de que ayude a su mujer que es ciega a escribir sus novelas... no lo sé, habría sido mejor contratar a una secretaria, habría sido más barato... pero es la historia del manga, no la mía.

Nuevamente Violet está obsesionada con un hombre.

Así que tienes estas mujeres robots, ¿para que podrían usarla en la industria?, no lo sé, para el espectáculo circense, para vender globos, cosas así de lógicas, así que esta compañía renta a las robots para hacer cartas máquina.

Claudia trata de darle una vida civil.

Así que la protagonista es otra clase de Auto Memory Doll, pero que es creada por otra compañía que bueno la pudo crear para ser... taxista, vender chicles en el metro, pero no, hacen una mujer robot, preciosa, gran personalidad y la mandan... a la guerra, un robot de combate con cuerpo de una diosa.

La recibe la familia Evergarden.

Gilbert (alias, el príncipe de la colina, lo decimos en tono argentino chillón), quien parece haber muerto, la envía a vivir una vida tranquila con la familia Evergarden después de que ella recupera la consciencia, pero no se adapta a la casa donde la fuerzan a vivir.

Violet pierde los brazos y les ponen unos de metal.

Así que Claudia Hodgins, amigo de Gilbert -Claudia, ja. La lleva a su empresa que se basa en escribir y enviar cartas, El servicio Postal CH, donde al ver como trabaja Cattleya Baudelaire transcribiendo los sentimientos de las personas.

Violet ve la clase de servicios de las Auto Doll, basado en escribir cartas.

Decide que quiere aprender sobre ese oficio, porque las últimas palabras de Gilbert era que le amaba y no es capaz de traducir esas palabras pese a que tenía esos sentimientos por Gilbert.

Ve como Cattleya crea una carta genérica de amor que encaja con su propia historia.

En mi opinión es demasiada enfocada en la parte romántica y se olvida de su propio realismo, no la voy a revisar desde luego, con el primer episodio me dí cuenta que si no encajas con un amor Shojo y averiguar lo que significa el amor del Príncipe de la colina, la serie no te va a enganchar.

Yo habría puesto a la voz de Eren, eso hubiera dado mucho de que hablar.

Me gusta Mikasa una vez que se explica su personaje en los materiales "basados" en el canon como ocurre con Lost Girls, pero como un tema centrado en el amor, nunca me ha gustado el personaje, el tono es muy parecido a La novia del antiguo mago, que la premisa es la proyección de una mujer sobre un personaje de ficción que todo el mundo odia y viene el príncipe alto y de voz profunda -rico también, para salvarla. Violet Evergarden quiere vender un personaje que sufre, pero es más efecto que sustancia.

Gilbert era alto, guapo, amable, el príncipe de la colina del Shojo.

No es completamente así, pero como en todo, los romances se construyen, no puedes esperar la empatía en el primer episodio con un personaje que parece Mikasa Ackerman con Peluca y pupilentes, esperando un éxito inmediato, esto desde luego no es Haruhi Suzumiya, pero como en todo, tien su público, es solo que no soy yo. -La parte que más me dio risa era el parecido y la expresiones de Violet son exageradamente parecidas a las de Mikasa, fue lo más chocante, pero imagino es intencional.

Si te gustan las producciones de Kyoto Animation, es más que recomendable.