México regaló 22.500 millones de barriles de petroleo a Estados Unidos: La Isla Bermeja

Cuando uno se entera de cosas que corren como rumores y no son publicitadas en los grandes medios se asombra con la gran hipocresía del gobierno de Felipe Calderón quien presuroso trata de deshacerse de PEMEX, dice que el petroleo se acaba, luego que debemos aprovechar los yacimientos transfronterizos con inversión privada, cuando no se requiere y cambia nuevamente el discurso para decir que necesitamos refinerías, cuyo costo no es tan caro si se construyeran cerca de los pozos de petroleo y no como megacomplejos millonarios que requerirán millones de dólares en llevarlos cerca de la frontera a Estados Unidos.

La Isla Bermeja es un ejemplo de como el PRI de Zedillo regaló a los Estados Unidos y sin muchas protestas en un tratado secreto, un yacimiento de 22.500 millones de barriles de petroleo, dicho tratado no se encuentra en el archivo histórico de la nación. Los diputados y analistas políticos se enteraron del problema cuando la nación del norte les recordó que la moratoria sobre la explotación en aguas profundas termina en 2011.

México y Estados Unidos suscribieron en junio de 2000 el tratado del Hoyo de Dona para proteger los yacimientos ubicados entre sus fronteras marítimas y firmaron una moratoria de 10 años durante la cual ninguna de las partes podrá realizar tareas de exploración y explotación de esos hidrocarburos

Para regalarle a los Estados Unidos gran parte de la placa continental de casi 1 millón de kilómetros cuadrados, Ernesto Zedillo habría supuestamente permitido la destrucción de un isla que definía el área limítrofe de las aguas Mexicanas perdiendo cien millas náuticas de aguas territoriales de 1997 a 2001, pues salvo que alguien me explique como una Isla se hunde 50 metros bajo el mar con el argumento del cambio climático, claramente se perfila un acto de alta traición del gobierno de Ernesto Zedillo.

Isla Bermeja, de unos 80 km cuadrados, era hasta hace tres décadas el último punto terrestre de México desde donde se fijarían las 200 millas náuticas que concede la ley para actividades económicas, pero ante su extraña desaparición, las islas Alacranes unos 326 km cuadrados ha sido tomada de referencia, lo que reduce en casi 100 millas, la soberanía de México sobre la zona.

Aunque figura en mapas de los siglos XVI, XVII, XIX y XX, un buque de la Secretaría de Marina no la localizó en 1997, aún cuando posteriores exploraciones la localizaron hundida a 50 metros bajo el mar, en cambio, sí aparece en una guía turística estadounidense por Internet y alimentada con datos de la Agencia Central de Inteligencia, en medio de las aguas del Golfo de México.

No ha costado a Felipe Calderón y Vicente Fox borrar de los mapas toda referencia a una isla vital para el país, en silencio.

El llamado Hoyo de dona, es el cruce de aguas transfronterizas de Cuba, Estados Unidos y México donde hay ricos yacimientos que el gobierno de Calderón no intenta ocultar su falta de interés en pelear por el territorio que es de nuestra propiedad, la Isla Bermeja sirvió para hacer el tratado de aguas e históricamente se puede probar ante las naciones unidas que esa extensión de territorio es nuestra.

Estados Unidos, quiere arrojar su frontera más al sur con base en las islas Dernier, por lo que además del regalo de Zedillo, perderemos más territorio. Lo mas gracioso es llamar islote a una isla de 80 kilómetros cuadrados, si eso contribuye a su desaparición virtual o convertirla en un mito y un mal cálculo de su descubridor.

Las coincidencias no son creíbles, menos cuando es una isla estratégica de una perla que Estados Unidos devorará entera, estos gobernandes de mierda que nos han tocado hoy nos quitan otro Texas.

El costo del robo podría mostrarse así  1.300.000.000.000 (Un trillón trescientos mil millones de dólares, multipliquelo por 14.20 para convertirlo a pesos) igual al producto interno bruto anual de todas las actividades comerciales en México.

¡Hágame el rechingadísimo favor!