Las aventuras de Peabody y Sherman (2014): Reseña y crítica de la película

Mr. Peabody & Sherman es una película animada dirigida por Rob Minkoff, quien tiene en su haber películas de la talla de El rey León (1994) y bodrios como Stuart Little (1999), regresa para adaptar un relato originado en la serie norteamericana The Rocky and Bullwinkle Show (1959).

No voy a negar que el inicio me sonó a una más de esas películas de DreamWorks construida a base de momentos ya muy estudiados y vistos en la películas de animación cosa de la que no se salve, pero en este caso, tenemos una aventura y comedia familiar bastante lograda que me ha tomado por sorpresa, por que no esperaba absolutamente nada de ella.

Trama
Peabody (Ty Burrell) es una perro que ha logrado todo lo que los miembros de su raza nunca han podido, convertirse en uno de los mejores en el campo de las ciencias, la tecnología y el deporte cuya mayor invención es la Máquina del tiempo, su único trauma en la vida es nunca haber sido adoptado por una familia humana, así que decide ser el primer perro en adoptar a un niño humano.

Definitivamente DreamWorks deberia evitar el estilo Pixar.

Sherman (Max Charles), es un niño cándido y de intenciones puras que tiene la dura tarea de aceptar que es el hijo de un perro luego de que Penny Peterson (Ariel Winter), compañera de clase, provoca. que el Servicio familiares e infantiles bajo la supervisión de la señora Grunion, amenace a Peabody con arrebatarle la custodia del niño.

Me he reído con algunos chistes que solo los adultos entenderán.

En su afán por ganarse la confianza de Penny, Shermana toma la máquina del tiempo, lo que desata el caos cuando en su rebeldía, provoca la muerte de Peabody.

No sabía que era sobre viajes en el tiempo y eso me subió la moral.

Calificación: 7.9/10

Crítica
Debo confesar que una de las razones por las cuales he abandonado la crítica de películas de animación, es porque ya ha llegado el punto donde las mismas son pura y esencialmente infantiles, desarrolladas para niños o personas con dicha mentalidad, lo que pienso es un error, pues un escritor crea historias y alguien ajeno las cataloga en este o aquel género, como afirmó en su momento el fallecido autor Maurice Sendak, creador de Donde viven los monstruos (1963). [1]

Una historia debería seguir sus propias pautas y jugar con los elementos sin preocuparse porque los niños no puedan digerirlo, estamos en una etapa donde la sociedad occidental, especialmente la norteamericana, se a aniñado, son infantes mentales y sus productos llamados oscuros para definir el drama tienden a ver esto de la manera más simplista catalogándolos de prohibidos, no recomendado para los pequeños.

DreamWorks tuvo en su momento con Shrek (2001) una mezcla de un guión adulto con elementos que atraían a los niños y eso les supuso un gran éxito, pero la repetición les llevó al tedio en el que sigue encajonada la productora que parece ya vivió sus mejores épocas, cuando el estilo Pixar pasó de una novedad a copiar a un estándar ignorable.

Las aventuras de Peabody y Sherman no intenta apelar a los niños, en cambio deja que las situaciones se den y de allí extrae esa chispa tan ausente en esta década.

- He hecho cosas peores, dice Bill Clinton en uno de los momentos de la película, podrías pensar en toda clase de sucesos, aunque todo te lleva a la felación de Monika Lewinsky en los años noventas del siglo pasado.

En el lado más dulce de las cosas, para todos los aficionados de Venture Bros, escuchar la potente voz de Patrick Warburton te deja frio y gritando como colegiala junto al siempre correcto Stephen Colbert, aunque esto claro se perderá en la versión al español.

Recomendable, no la mejor, pero si te dormiste con Enredados y Mi villano favorito, esta no te hará dormir, te lo aseguro.

Bibliografía

1. “I don't write for children. I write — and somebody says, 'That's for children!'" Grim Colberty Tales with Maurice Sendak Pt. 1 y Pt. 2, The Colbert Report, 21 y 25 de enero de 2012.

Imágenes propiedad de sus respectivos autores, DreamWorks, 2014