IronMan 3 (2013): Reseña y crítica de la película

Iron Man 3 es una película del género de los superhéroes dirigida por Shane Black que conocerán en el mundillo de las cintas de acción por los guiones de Arma mortal (1987), siendo esta su segunda película luego de Entre besos y tiros (2005) dirigiendo a Robert Downey Jr. en su papel de un fugitivo que audiciona por error para una película.

Robert Downey Jr., Gwyneth Paltrow y Guy Pearce protagonizan una tercera parte que puedo calificar como la mejor de las tres, siendo Iron Man 2 la peor de todas.

Esta película no parece escapar a esa moda en el cine norteamericano del giro de guión, si bien no es nada del otro mundo que el malo principal sea completamente diferente a lo esperado, como el hombre tras la cortina del Mago de Oz (1939).

Tiene cosas malas y muy malas, aunque es una película plena que logra imprimirse de un personalidad propia. El ritmo parece ser un problemas en todas las películas del género, los malos especialmente les falta más tiempo y sus motivaciones son meros pretextos para resolver problemas entre los protagonistas.

Por otro lado, el trauma de Tony Stark (Robert Downey Jr.) no está bien desarrollado, puede funcionar, pero no lo hace salvo para definir la construcción final y epílogo de la película, como sea, una recomendable cinta de acción.

Algo que quiero hacer notar es que esta cinta es casi un velado homenaje -o un guión de cajón- a Arma Mortal (1987) de Shane Black (vea la parte de crítica).

Trama
Tony Stark (Robert Downey Jr.) vive sus días recluido en su casa de Malibu construyendo trajes de Iron Man, la invasión de los extraterrestres a Nueva York le ha dejado un trauma que no desea reconocer y que afecta su vida afectiva con su ahora esposa Pepper.

Si esperaban una trama de rivalidad y engaños, no la hay.

Al mismo tiempo un terrorista llamado el Mandarín, amenaza al presidente de los Estados Unidos con darle una lección en público atacando intereses del país de las barras y las estrellas, luego encargándose personalmente del presidente.

Guy Pearce como Aldrich Killian

Iron Patriot reemplaza a Iron Man como ocurre con los Avengers, pues el gobierno norteamericano quiere mostrar que tiene el control de su territorio -algo que parece más que discutible-.

Hola cariño.

Por otro lado, la esposa de Stark, Pepper Potts (Gwyneth Paltrow) es visitada por un antiguo colega especializado en biotecnología que trata de venderle un plan para el desarrollo de una sustancia capaz de modificar el ADN de cualquier organismo, a lo que Pepper se niega.

Tony pierde la paciencia, el Mandarín no se lo toma a bien.

El antiguo colega y pareja de Pepper, es Aldrich Killian (Guy Pearce), conocido por Stark en su pasado de parrandero y mujeriego, quien está de alguna forma relacionado al Mandarín.

Iron Patriot reemplaza a Iron Man en la parte militar del concepto.

Luego de que Happy Hogan (Jon Favreau) -su guardaespaldas- es herido por uno de los hombres de Killian, Stark hace una advertencia al Mandarín que lo pone en apuros, pues Killian asalta la casa de su odiado rival con helicópteros de ataque, Stark, quien es tomado como desaparecido, tendrá que descubrir la verdad sobre el Mandarín.

Mandarín; se explica por qué no es chino y por qué al final de cuentas, no es el Mandarín.

Calificación: 7.1 / 10

Crítica
Muy entretenida, a mi parecer la mejor de las tres, no es para nada perfecta, quien conoce la manera de actuar de Robert Downey Jr. sabe que no es un tipo dado al drama, a veces tragicómico; pero eso de que tiene un ataque de pánico nunca terminas por creerlo.

En Entre besos y tiros (2005) ya conocemos todos sus recursos histriónicos y la manera en que recibe cada noticia Downey Jr.: haciendo su cara hacia atrás, ladeando la cabeza -con el mentón un poco alzado- como analizando las cosas, viendo hacia abajo a su interlocutor, sacando mucho la lengua y levantando los brazos como si estuviera desubicado, por desgracia, esta mímica a la hora de un drama como lo sería la representación de un trauma psicológico, la realidad es que no rinde hasta el punto de parecer demasiado fanfarrón.

Guy Pearce como malo tiene el mismo problema, le falta soltura, se ve demasiado robótico en el plano. Pienso que revelar tan pronto al malo verdadero no ayudó cuando el giro argumental aparece, pues al ser tan cortas las apariciones del Mandarin ya te avisa que no es el antagonista principal.

Luego están errores de continuidad donde Tony Stark dice que las 42 armaduras están codificadas para él, pero luego Pepper puede usarlas sin problema, (no olvidemos que cuando Pepper usa la armadura la primera vez, es porque Stark controla la armadura).

Sobre los giros de guión, no puedo negar que fueron agradables, pero de tanto giro de este tipo ya te los sabes todos y no es la primera vez donde el malo principal es solo parte de un entramado mayor y se reduce a un mero actor al servicio del malo verdadero.

Pero sobre todo, los que han visto Arma mortal y sus secuelas deben reconocer la mano de Shane Black:

• La destrucción de la casa de Stark es una típica escena de Arma Mortal con helicópteros atacando.
• Curiosamente en ambas películas el protagonista cae al agua y se salva con algo relacionado a un brazo, en Arma Mortal; Riggs se disloca el brazo, en la Iron Man 3; Stark es ayudado por una mano robótica.
• En ambos casos deben escapar de un cuerpo de agua donde queda atrapado.
• El personaje principal tiene un trauma psicológico.
• El coprotagonista es negro.
• El malo se relaciona al pasado de uno de los protagonistas.
• Ambas son sobre drogas y sobre fuerzas militares involucradas en su manejo.
• Riggs y Stark son dados por fallecidos.
• Ambos son excéntricos.
• La novia/esposa es una mujer de armas tomar.

Recomendable.