El problema de Veena que toma mucho tiempo en el manga y es una historia bastante traumática y más interesante que con Yukine, se reduce para explicar al rebelde Tesoro Sagrado que pudo ser resuelta en un par de episodios y no en el 70% de la serie.
En el manga el autor habla mucho de Veena y Yato, jugando con el hecho de que deben aprender a desprenderse de su pasado para continuar a su presente, es solo que el autor falla porque Yato no es capaz el lazo con Hiyori, interfiriendo en su vida. La historia del manga tiene sus momentos, pero hay muchas cosas que no llegan a una resolución satisfactoria, por un lado para evitar caer en cliches, por otro la falta de coherencia del autor en la línea de lo que quiere expresar de que a veces debemos cortar los lazos por muy doloroso que esto sea.
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Trama
Hiyori llega con Kofuku para ayudar a Yato, pero Daikoku le impide el paso, Hiyori le ruega por la vida de Yato y este decide ir a por otros Tesoros sagrados, solo requiere de dos para realizar la purificación de Yukine.
Pero nadie parece estar dispuesto a ayudar a un dios menor como Yato. Así que únicamente Mayu de Lord Tenjin, la anterior Tesoro sagrado de Yato, le acompaña.
Hiyori va a buscar a Kasuma cuando descarta a la Errante para pedir su ayuda, pues considera lo que podría hacer con Yukine a quien desprecia.
Kasuma va a ayudar a Yato por una deuda de su pasado, impidiendo que Yukine se marche, quien además no parece en absoluto arrepentido. Este le pide a Yato que revoque el nombre de Yukine para que este se corrompa sin afectarle en absoluto.
Al quitarse la camisa se dan cuenta de lo contaminado que está y lo tienen que contener, este se transforma parcialmente en un fantasma que se niega confesar sus crímenes u aceptarlos.
Yato trata de decir su nombre, pero está muy débil, Hiyori le dice que Yato ha estado soportando su deslealtad como un padre y que él debería reconocer eso. Yato le dice que le dió un nombre de persona y que debería vivir como una.
Al final Yato es salvado cuando Yukine se arrepiente de lo que hizo y Hiyori llora, Yato piensa que gracias a las decisiones de Hiyori, él ha sobrevivido.
Mientras tanto vemos a la Errante hablar con un extraño de nombre Rabo, al que ella afirma haber despertado, este llama a Yato el dios de las calamidades.
Calificación: 7/10 |
Crítica
Demasiado tiempo empleado para adaptar una historia tan pequeña y que tiene muchos elementos ausentes que hacen fallar la fuerza narrativa, ya lo había dicho antes, el tema de que Yukine roba en la casa de Hiyori es completamente suprimido y endulzado con lo ocurrido con la patineta, pero se omiten otros robos porque parece que es algo que parece tabú en Japón.
Tampoco la apreciación de Yato era necesaria cuando Hiyori podía perfectamente hacer esa reflexión, aunque la decisión es menos importante, pues la Errante nunca le demuestra una abierta hostilidad.
Creo que se debieron fusionar ambos arcos, el de Yukine y Veena, pues queda muy poco tiempo para nada más, el nuevo personaje que aparece es exclusivo de anime y no tiene que ver en absoluto con el manga, aunque igualmente la Errante tendrá el mismo destino que en el manga.
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