Fire force (2019) Primeras impresiones del anime

Y llega la adaptación del manga de Enen no Shouboutai de Atsushi Ohkubo en más intentos de desplazar el agujero dejado por Naruto que todavía no ha sido llenado.

La historia nos habla de un grupo de bomberos que se ubica en lo que parece ser un Tokio moderno.

Es el año 198 de la era solar de Tokia, que indica que hace 198 años, el mundo sufrió un desastre de grandes proporciones que desoló naciones enteras, de la cual Japón sobrevivió para convertirse en un Imperio.

El manga consiste de 16 volúmenes, muy joven, cuando Naruto consta de 72 volúmenes y My Hero Academia apenas 23.

Shinra Kusakabe, es un nuevo recluta de lo que parece ser un equipo de bomberos, pero cuya misión no es apagar incendios, sino combatir a personas que por una razón misteriosa, arden espontáneamente.

Parece Japón Moderno, en cambio es una realidad alternativa.

A estas personas se les llama infernales, los primeros fueron personas que perdían el control contra su propia voluntad y perdían su humanidad.

Los ninjas, los héroes, cazadores... etcétera, los bomberos.

La segunda y tercera generación tuvieron la habilidad de mantener su forma humana mientras ganaban poderes, la tercera generación, a la cual pertenece Shinra, han ganado el mote de Huellas del Demonio.

La extraña enfermedad y los niños que surgen con poderes.

Cuando Shinra perdió a toda su familia, todo el mundo le culpó y eso se debe a que el chico tiene un problema, que cuando se siente nervioso sonríe con sus dientes de diablo.

Shinra y su raro defecto de sonreír cuando está tenso.

Él está seguro de que una persona provocó la muerte de su familia y decide dedicar su vida a convertirse en un héroe.

Todos sus compañeros tienen su pasado trágico.

Se integra a la octava compañía especial de bomberos que usan a personas con habilidades de segunda generación y humanos normales, él, junto con su rival de días de entrenamiento, Arthur Boyle, son los primeros de tercera generación.

Los típicos rivales.

Shinra es culpado del fuego que supuestamente mata a su Madre y su hermano llamado Sho, al tener un nombre, sabemos que está vivo y es el verdadero origen del fuego y eso lo digo sin haber leído el manga, de otra manera no tendría nombre, como su madre.

El Kyubi.

Él piensa que había alguien además al momento de ocurrir la desgracia y esa persona es la responsable del desastre de su vida, luego de que es rechazado por su propia abuela, quien le llama Demonio al más puro estilo Naruto.

El enemigo misteriosa principal.

Se convierte en el chico con la sonrisa de diablo que no puede evitar cuando está nervioso.

El pasado triste en el que se le culpa de la destrucción de su familia...

Dentro del cuerpo de bomberos o la Fuerza de fuego, Shinra empieza el camino para redimirse con el mundo y encontrar un grupo de compañeros que comparten sus mismas experiencias.

El poder para hacer sus sueños realidad.

 Y su Camino del Héroe comienza.

El reconocimiento.

No voy a revisar este anime, me parece que está por encima de promedio, pero básicamente sigue siendo lo mismo que encontramos en la mayoría del Shonen de nuestros días: el chico que tiene un poder interno que lo hace un indeseable frente a la sociedad, quiere ser Hokage... Héroe, tiene un rival de toda la vida, el enemigo oculto que lleva toda la trama de fondo que se relaciona con su tragedia de la infancia, un hermano que puede ser su peor enemigo, tiene su propio Obito-Tobi, etcétera.

Son series diseñadas a tener varias temporadas, creo que para mi fue Dragon Ball, Naruto no fue relevante para mi fuera de la primer temporada donde veíamos el surgimiento de una nueva tendencia en el género del Shonen, cuando Dragon Ball fue el final de la vieja tendencia.

En resumen, es un producto para enganchar a niños que se vuelven adolescentes y la dejan de lado una vez saltan a la preparatoria y leerán semanalmente un nuevo episodio hasta tener cientos de capítulos y decenas de Tankōbon-Compilatorios.

Cambia la forma, pero el fondo es el mismo, grandes escenas de acción, personajes coloridos y toda una larga serie de elementos de misterio para aquellos que gusten de hacer teorías que se conocerán hasta el final o se dejarán abiertas, pero que el final será mediocre, porque un Shonen no es acerca del fin, sino de que la vida continua.

Pero si quieres invertir en el género y lo tuyo no es Dragon Ball, ni Naruto o My Hero Academia, puede que sea la serie de largo plazo que seguirás religiosamente cada semana.

Recomendable.