Las explosiones en ciudad de México: Usaron C4

Ahora que de los dos probables responsables del atentado el 15 de febrero a las 2:32 de la tarde en la Av. Chapultepec, uno fallecido, la otra herida de gravedad al manipular y transportar la bomba, se sabrá de la sobreviviente el blanco original del atentado, mismo que no se concretó, lo que ya se sabe es que la explosión se originó debido o bien a la inestabilidad química de los componentes o al fallo de la electrónica del detonador.

No se sabe a ciencia cierta si era para llamar la atención o un atentado terrorista, debido a la poca cantidad de explosivo pese a la magnitud de los daños.

Este se debe volver un tema de seguridad nacional, no se debe de permitir este tipo de infamias que pululan en países occidentales y de oriente medio, el terrorismo debe ser castigado "severamente" o nos arriesgamos con atentados sangrientos contra la población civil y militar.

Un explosivo de uso militar elaborado con un compuesto de C4, clorato, balines de medio centímetro de diámetro y gotas de mercurio, estalló ayer a unos 60 metros del edificio principal de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF).

El C4 es un explosivo plástico que no se comercializa en México y que mezclado con el clorato y los balines se vuelve altamente inestable, por lo que cualquier movimiento lo hace explotar.

Elementos del Grupo Fuerza de Tarea, agrupamiento de la SSP-DF especializado en el manejo de explosivos, trataron de indagar con el escaner Sabre las características del explosivo utilizado. Sin embargo, la mezcla del compuesto impidió que se le reconociera, por lo que se acudió al Ejército Mexicano para identificarlo, lo que se logró durante las primeras horas de este día.

Las investigaciones iniciales señalan que el explosivo sería activado mediante un capacitor que provocaría la ignición desde un teléfono celular.

La carga, según las indagaciones, podría estar dirigida a tres blancos: las instalaciones del Metro Insurgentes, el estacionamiento de la SSP-DF, conocido como la “cama de piedra”, o el propio edificio de la policía capitalina.

No obstante el alto grado de destrucción del C4, los informes aseguran que se utilizó en cantidades muy pequeñas, pues la intención era únicamente causar notoriedad. Autoridades federales y locales ya trabajan en conjunto para investigar el caso.