Anterior episodio 6: Takamiya y la prueba de amor
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Trama
Kazane, la madre de Ayaka se encuentra a su hija y las brujas de la Torre, con quienes esta se asocia para defender a Takamiya, deja que Medusa le posea e intenta detener a su madre, llamando a Medusa.
Al menos las escenas típicas son escritas de manera diferente. |
Kazane le muestra a su hija que su fusión con Medusa no servirá, pues ella es más poderosa con Takamiya, eso solamente le ha debilitado.
Takamiya tiene que evitar que se de cuenta de que él ha perdido sus sellos mágicos, así que cuando la madre de Ayaka intenta atacar a su hija, este intercambia su cuerpo con ella, recibiendo el golpe estoicamente, Medusa es arrestada dado que su fuerza en menor a la de Kazane.
Al estar encerrada Medusa, Kazane piensa interrogarla, pero se la quitan de las manos las brujas del Taller y la dejan con el enojo.
Ayaka quiere escapar, le dice a Takamiya que solo estará seguro en esa ciudad, que deben pelear con orgullo por su modo de vida. Ella intenta besar a Takamiya quien se resiste, pero Ayaka en realidad solo quería hacerle un cariño para sacar parte de su poder mágico.
Kazane deja libres a ambos, pues Medusa es llevada lejos por las brujas del Taller, que se la quitan, así que no ve necesidad de tenerlos en prisión. Momentos después, ella se entera que Medusa escapa nuevamente, al llegar a casa se encuentran con el quinteto de Ivory, que ahora son invitadas oficiales.
¿Muy bien madre, quien pagará la cuenta? |
Calificación: 6.5/10 |
Pese a que la historia me pare divertida, lo suficiente para seguir viéndola, creo que al intentar desarrollar el tema romántico, ha caído en un montón de soluciones fáciles del género del harén que se superponen demasiado a la narrativa, especialmente la idea del hombre sumiso y la chica perfecta enamorada de este sin motivo aparente o por una ridícula promesa de la infancia. Aunque lo más interesante de todo esto, es la manera en que el género del harén se a adaptado muy lentamente a una era en que esto ha dejado de ser atractivo para el público japonés, pero muchas cosas malas aún permanecen.
Y es que Takamiya llega al punto de ser tan irreal como Ayaka cuando tratan de ser puestos en situaciones narrativas románticas, donde es desesperante su nivel vergüenza y castidad épica, se nota que ambos personajes no embonan fuera de la irreal voluntad de Ayaka por protegerle, mientras Takamiya asume la posición de la princesa en desgracia.
En los dos últimos años he visto varias series que pueden calificarse de harén, que evitan caer en sus excesos, porque finalmente el espectador está cansado y los escritores terminan capados, incapaces de escribir nada más que relaciones platónicas, han intentado centrarse en una relación, pero eso no les impide reciclar.
Respecto a Medusa, creo que es el personaje que indirectamente es más encantador del grupo de brujas de la Torre, pues tiene personalidad un poco alejada de los villanos habituales en el manga, pero son tantos que es algo aventurado de afirmar.
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