No miren arriba (2021) Meteoros y Trump de nuevo... Feministas y Progres intentado hacer sátira política - Reseña

Con Don't Look Up pasó lo mismo que con la sátira de la navidad "Santa Inc.", si no tienes un compás moral del cual partir, si no puedes mirarte al espejo y ser franco, no puedes hacer sátira.

Cuando ves a Jonah Hill, es en ese momento en que te cae el veinte de que es medio comedia, ves a Leonardo Di Caprio y es un medio drama, aparece Jennifer Lawrence y es una medio sátira feministoide para esta media película.

La cinta se siente bastante simétrica a Impacto Profundo y sobre ese esquema intenta construir una trama que ignorando a Biden, parece que estar pensada para ser lanzada durante la era Trump. así que no es de extrañar que se hubiera planeado con la idea de que Trump siguiera gobernando y no van a criticar a la razón y la justicia que supuestamente representan los demócratas.

La película fue escrita y dirigida por Adam McKay, que ustedes no conocerán de nada especial, pero es muy prolífico como escritor y director, algunos trabajos como Ant-man, como uno de sus tantos guionistas, pero el sujeto se define como un socialista democrático y milita en el partido Demócrata en favor de Bernie Sanders, ex-aspirante presidencial que tiene unas preferencias muy exquisitas para ser un socialista, tal vez por eso McKay hace una mezcla de Hillary y Trump, aunque no decide meterse con Biden.

La trama

Kate Dibiasky (Lawrence), la estudiante de doctorado en astronomía de la Universidad Estatal de Michigan, descubre un cometa previamente desconocido justo dentro de la órbita de Júpiter a 4,6 au del Sol. Su profesor, el Dr. Randall Mindy (Di Caprio), calcula que impactará la Tierra en unos seis meses y es lo suficientemente grande como para causar un evento de extinción en todo el planeta, que la NASA confirma internamente.

La presidenta Janie Orlean (Meryl Streep) y su hijo, el jefe de personal Jason (Hill), se lo toman como una buena oportunidad para mejorar su mala imagen y remontar en las encuestas de las próximas elecciones y luego como una oportunidad. ¿Por qué no le hicimos caso a una mujer blanca pelirroja y gritona con corte de bacinica?

Jonah es la representación de la hija de Trump.

La película es sobre la caída de un meteoro y cómo los tontos republicanos, que son el foco central, son la razón de que el mundo se acabe, por eso la frase de No miren arriba, en referencia al MAGA de Trump.

El director por tanto habla de la gente de derecha, porque la película se pone en una postura: yo demócrata, ustedes republicanos y se nota desfasada, tendría sentido si Trump siguiera en el poder, termina en yo la única verdad, yo la única razón y sí, es un reflejo de la sociedad actual, si, la sociedad actual que está polarizada precisamente por la ideología del grupo que produce esta película.

Una crítica no puede pasar por la idea de que ellos son muy tontos por no escucharnos. Una sátira es global, no se contiene a un grupo o hace una diferencia correcta de lo incorrecto, su centro es parodiar la realidad sin petulancia o ideología. 

Cambio climático, las Fake News, la opresión patriarcal, los falsos ídolos empresariales... un montón de cosas que me pasaron por una oreja y salieron por otra, porque es una película realmente larga y fuera de algunas escenas, la mezcla de comedia y drama sin un patrón estructurado nada más no hizo clic conmigo, el final de la película choca con el epílogo, es como ver una película de Marvel con chiste-drama-chiste.

No estoy ya tan joven para que me eduque gente obtusa y menos feministas blancos con sus ideas progres, esto no es Dr. Strangelove, una película que tiene situaciones cómicas, pero que no te pretende hacer reír, No miren arriba desesperadamente lo intenta pero se vale de una comedia barata, cuando Jonah Hill interrumpe a Di Carpio, era como ver la escena de Jim Carrey interrumpiendo al actor que representaba a un militar en Sonic: La película.

Calificación: 4.8/10

Del montón.